La mesa está servida y el escenario electoral para la enmienda electoral es similar al que se presentaba dos semanas antes del día de la votación para el referendo de reforma constitucional. Las encuestas dan paridad entre ambos bloques. La diferencia la marcará nuevamente el voto de los indecisos (10% de los votantes aproximadamente) y la participación/abstención que haya entre chavistas y opositores. Sin embargo, el día lunes 02 de febrero Hugo Chávez metió la pata hasta al fondo y ese error garrafal pudiera significarle la derrota.
Me explico. Dentro de la estrategia para lograr la reelección indefinida, se contemplaba mostrarle como un líder internacional. De allí las recientes visitas de Raúl Castro, Luís Ignacio Lula Da Silva y Cristina Fernández de Kirchner; su visita a Colombia para reunirse con Álvaro Uribe; y la reunión con los “becados”, perdón, con los presidentes miembros del ALBA. Para resaltar esta última reunión necesitaba público, ese que ya no asiste espontáneamente, así que diseñó la siguiente estrategia:
1° Utilizó el engaño. No avisó con antelación el día feriado obligatorio para celebrar los diez años de la revolución. Lo notificó el día sábado para que la gente no se le fuera de puente.
2° Utilizó la coacción. Advirtió a todos lo empleados públicos que el día lunes debían presentarse con camiseta roja a su lugar de trabajo y que se pasaría lista de asistencia. Amenazó con procedimientos administrativos y penales a los particulares que no acataran el llamado de celebración, a pesar de no haberse publicado con antelación, ni haberse publicado en Gaceta Oficial.
3° Utilizó la violencia. Envió a guardias nacionales y a sus tarifados a amenazar a los comerciantes privados a cerrar sus puertas. Así se aseguraba que las personas estuvieran en sus casas para escuchar las cadenas.
Lamentablemente para él, las consecuencias fueron que el gobierno dio la impresión –nuevamente- de ser unos improvisados; pequeños, medianos y grandes comerciantes fueron afectados porque no pudieron tomar previsiones; miles de personas acudieron a su trabajo o su lugar de estudio porque ignoraban la medida; los empleados públicos fueron sometidos a una espera interminable y a soportar lluvia y se quejaban de tanto abuso; muchas personas se quejaron de las acciones violentas de las cuales fueron objeto y como si fuera poco se desató un cacerolazo espontáneo de un pueblo que parecía dormido desde hace muchos años.
Me explico. Dentro de la estrategia para lograr la reelección indefinida, se contemplaba mostrarle como un líder internacional. De allí las recientes visitas de Raúl Castro, Luís Ignacio Lula Da Silva y Cristina Fernández de Kirchner; su visita a Colombia para reunirse con Álvaro Uribe; y la reunión con los “becados”, perdón, con los presidentes miembros del ALBA. Para resaltar esta última reunión necesitaba público, ese que ya no asiste espontáneamente, así que diseñó la siguiente estrategia:
1° Utilizó el engaño. No avisó con antelación el día feriado obligatorio para celebrar los diez años de la revolución. Lo notificó el día sábado para que la gente no se le fuera de puente.
2° Utilizó la coacción. Advirtió a todos lo empleados públicos que el día lunes debían presentarse con camiseta roja a su lugar de trabajo y que se pasaría lista de asistencia. Amenazó con procedimientos administrativos y penales a los particulares que no acataran el llamado de celebración, a pesar de no haberse publicado con antelación, ni haberse publicado en Gaceta Oficial.
3° Utilizó la violencia. Envió a guardias nacionales y a sus tarifados a amenazar a los comerciantes privados a cerrar sus puertas. Así se aseguraba que las personas estuvieran en sus casas para escuchar las cadenas.
Lamentablemente para él, las consecuencias fueron que el gobierno dio la impresión –nuevamente- de ser unos improvisados; pequeños, medianos y grandes comerciantes fueron afectados porque no pudieron tomar previsiones; miles de personas acudieron a su trabajo o su lugar de estudio porque ignoraban la medida; los empleados públicos fueron sometidos a una espera interminable y a soportar lluvia y se quejaban de tanto abuso; muchas personas se quejaron de las acciones violentas de las cuales fueron objeto y como si fuera poco se desató un cacerolazo espontáneo de un pueblo que parecía dormido desde hace muchos años.
En conclusión, el rechazo fue absoluto. Tanto los opositores como los chavistas y los indecisos se quejaron de su acción totalitaria. La derrota la tiene marcada en la frente y el mismo se la propinó.
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